Organización del trabajo
Hacia un bachillerato como comunidad de investigación comprometida con el trabajo y con el mundo
La normativa curricular deja en la autonomía de los centros la organización del Trabajo de investigación, un proyecto sin asignación horaria que a menudo termina acarreando dificultades de conciliación entre el horario laboral del profesorado y las necesidades de tutoría del alumnado.
Sin embargo, el proceso de investigación requiere aplicar conocimientos y procedimientos que son contenido de materias de primer curso, y que refuerzan las competencias clave trabajadas en la ESO. El Trabajo de investigación se convierte en una oportunidad para consolidar estas competencias básicas a nivel de bachillerato, necesarias para la continuidad de los estudios, la vida cotidiana y el ejercicio de la ciudadanía.
Tanto el aprendizaje como el proceso de investigación pueden beneficiarse de una organización más colaborativa del trabajo, basada en:
- la comunicación del propio trabajo, que requiere entender qué se está haciendo y encontrando, para poder explicarlo a otras personas, y a la vez abre espacio para una mirada interdisciplinaria desde la puesta en común de los trabajos;
- la evaluación formativa y formadora, orientada a la mejora del trabajo y el aprendizaje;
- un clima grupal de compromiso y colaboración, basado en el diálogo reflexivo, la confianza y la ayuda mutua.
Por eso, proponemos buscarle un sitio al proceso de investigación en el horario lectivo, integrando los trabajos en la programación de bachillerato desde el primer trimestre.
